¿Sufres reflujo gastroesofágico? Descubre cómo prevenirlo

Primero, tienes que tener en cuenta que el reflujo de contenido del estómago al esófago (reflujo gastroesofágico) es algo normal que sucede varias veces al día en todas las personas. Cuando ese reflujo ocasiona síntomas o cualquier complicación es cuando se denomina ERGE.

Los síntomas más habituales son:

• Pirosis (ardor).
• Afonía y carraspera (por irritación de la laringe debido al ácido refluido).
• Asma o dificultad respiratoria (por aspiración del ácido a la vía respiratoria).

Hay una serie de factores que pueden precipitar la aparición de reflujo:

• Obesidad: el riesgo aumenta a la vez que lo hace el índice de masa corporal (IMC).
• Dieta: alimentos que pueden provocar disfunción del esfínter, como por ejemplo cítricos, bebidas carbonatadas, cafeína, chocolate, cebolla, especias, comidas ricas en grasas, menta y hierbabuena, alcohol, etc.
• Ejercicio físico: el ejercicio intenso podría agravar los síntomas. El moderado podría ser un factor protector.
• Tabaco: aumenta el riesgo en los fumadores. 
• Medicamentos: pueden empeorar los síntomas de ERGE medicamentos como la aspirina y otros AINE, por inhibición de la ciclooxigenasa; benzodiacepinas, anticonceptivos orales y bifosfonatos, por producir la relajación del esfínter esofágico inferior; y corticoides, antagonistas de los canales de calcio, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, clopidogrel, suplementos de hierro, digoxina, teofilina, eritromicina, tetraciclinas y potasio, por sus efectos digestivos.
• Hernia de hiato: presentan más riesgo de padecerla las personas diagnosticadas con hernia de hiato. Parte del estómago asciende a través del diafragma al tórax, dificultando la función del esfínter esofágico inferior y favoreciendo el reflujo. La asociación hernia de hiato con reflujo gastroesofágico es frecuente, pero hay hernias de hiato sin ERGE y ERGE sin hernia de hiato.

¿Qué puedes hacer para mejorar o prevenir el reflujo?

• Realiza comidas poco copiosas y distribuye los alimentos en 4-5 comidas al día para facilitar las digestiones.
• Identifica y evita aquellos alimentos que te produzcan molestias en la digestión. El café, chocolate, té, tomate, picantes, cítricos y bebidas carbonatadas pueden producir molestias digestivas en algunas personas.
• Procura que, como mínimo, tu tiempo de comida sea entre 20 y 45 minutos. Mastica suficientemente los alimentos.
• Evita el alcohol.
• Evita el estrés.
• Realiza ejercicio físico de forma regular. Pero ten en cuenta que si lo haces después de comer o es muy intenso, puede empeorar la acidez.
• Controla tu peso.
• Deja de fumar.
• No lleves ropa ajustada o cinturones muy apretados, ya que pueden aumentar la presión en el interior del abdomen y, por tanto, provocar reflujo.
• Evita acostarte después de comer, espera al menos 2 horas para hacerlo. En algunos casos, elevar la cabecera de la cama 20 cm puede producir un beneficio si sientes reflujo nocturno. Sin embargo, esta posición puede interferir con el sueño: lo importante es que descanses bien. Recostarse sobre el lado izquierdo facilita el vaciado gástrico.

Si a pesar de introducir estos cambios el ardor o acidez no desaparecen, en tu farmacia encontrarás medicamentos de venta sin receta específicos para esta situación como los antiácidos o los inhibidores de la bomba de protones (IBP). Como siempre, y sobre todo cuando se trata de medicamentos, no olvides que tienes a tu disposición un profesional sanitario que puede resolverte cualquier duda al respecto.