Cómete el arco iris: incorpora comida de colores a tu dieta

“Eat the Rainbow” o “cómete el arco iris” es una frase que se va escuchando más en los últimos años de la mano de un interés cada vez mayor en comer de una manera más sana. Esta frase hace referencia a la idea de que un plato con frutas y verduras de diferentes colores no es solo visualmente atractivo, sino que también tendrá mayor variedad de nutrientes.

Este concepto anglosajón se basa en el hecho de que frutas y verduras de diferentes colores contienen diferentes tipos de vitaminas, minerales y antioxidantes. Por ejemplo: 

• Las verduras y frutas rojas, como los tomates, las sandías o las fresas contienen licopeno, que es un poderoso antioxidante que se relaciona con una reducción del riesgo de padecer problemas del corazón o cáncer. 

• Las verduras y frutas amarillas y naranjas, como zanahorias, naranjas o batatas tienen un alto contenido en carotenoides -un compuesto que el organismo transforma en vitamina A, esencial para el sistema inmune o la vista- y en antioxidantes, que pueden ayudar a prevenir problemas crónicos como enfermedades cardíacas y cáncer. 

• Vegetales verdes, como las espinacas o el brócoli tienen mucho ácido fólico, vitamina K y potasio, compuestos imprescindibles para tener unos huesos fuertes y unos niveles de presión sanguínea correctos.

Ideas de desayuno, comida y cena para menús con comida de colores

Una buena manera de “comerse el arco iris” es incluir al menos una fruta o vegetal de cada color en una de las comidas del día. Puedes seguir los ejemplos que te proponemos:

1 - Desayuno. Puedes empezar el día desayunando un bol de fresas, arándanos y kiwi, o hacer un revuelto de huevos con pimiento rojo y amarillo. 

2 - Comida. Para comer, una opción es que prepares una ensalada con diferentes hojas verdes, tomatitos, zanahoria rallada y rodajas de pepino. 

3 - Cena. Para cenar, una buena elección puede ser asar batata, brócoli y cebolla morada, o saltear kale, pimiento rojo y setas, con un poco de ajo y jengibre.

Las verduras y frutas amarillas y naranjas -zanahorias, naranjas o batatas- tienen un alto contenido en carotenoides, un compuesto que nuestro organismo transforma en vitamina A.

Cómo hacer que los niños coman más verduras y frutas y prueben nuevos sabores y texturas

Además de ser delicioso y nutritivo, “comerse el arco iris” es una manera estupenda de divertirse con la cocina y de explorar nuevas comidas y sabores. Incorporando una amplia gama de vegetales y frutas de diferentes colores en tu dieta descubrirás, sin darte cuenta, nuevos alimentos interesantes y reconfortantes. 

También puede ser un estímulo para introducir en el arte de la cocina a los más pequeños de la casa, planteando este concepto como un reto en el que sean ellos quienes elijan los alimentos correspondientes a cada uno de los colores del arco iris. Es un hecho que, cuando los niños interactúan con la comida y participan de la elaboración de los platos que se les van a servir, tienen una actitud mucho más receptiva hacia los mismos y es más probable que se animen a probar nuevos sabores y texturas.

En conclusión, “comerse el arco iris” es un concepto simple, pero poderoso, que puede ayudarte a mejorar tu salud y bienestar. Introduciendo una variedad de colores en tu dieta puedes asegurarte una variedad de nutrientes y fitonutrientes. Así que, la próxima vez que estés planeando tu menú, acuérdate del arco iris y benefíciate de una dieta colorida.