¿Cómo prevenir los piojos y las liendres en los niños?

Cada año, en algún momento del curso escolar, llega la terrible circular que avisa de una visita nada grata: los piojos. Toca entonces revisar a conciencia las cabezas de los niños en busca de estos molestos visitantes.​

Para ello, lo ideal es que tras una observación al detalle de la cabeza del niño o la niña, se pase la lendrera por todo el cabello. De esta forma será mucho más fácil localizar tanto piojos como liendres, si en una primera revisión ocular no han aparecido ni hay síntomas evidentes como picor o irritación en el cuero cabelludo.​

¿Podemos prevenir la aparición de piojos en las cabezas de nuestros hijos? Podemos intentarlo, claro. Hay una serie de medidas preventivas básicas: ​

• Se debe evitar que los niños compartan cepillos o peines, gomas de pelo, horquillas… Este ya es un paso importante para impedir que los piojos o liendres que pueda haber en uno de estos objetos pasen a otras personas.
• También ayuda mucho recoger el pelo en una coleta o moño.
• Durante el curso, es recomendable aplicar un repelente de piojos con la periodicidad que recomiende el fabricante. Normalmente con un par de días a la semana es suficiente para mantenerlos lejos.
• Por último, es fundamental pasar la lendrera habitualmente, aunque no haya piojos. De esta forma podremos cazar los piojos de forma prematura, incluso antes de que llegue la nota terrible del aula.​

Es habitual que nos preguntemos si los piojos saltan o vuelan, y si de esta forma pueden pasar de una cabeza a otra. La respuesta es que los piojos no tienen esta capacidad, por lo que pasan de persona a persona a través del contacto directo.​

¿Qué tratamiento contra los piojos es el más eficaz?​

Si no hemos tomado medidas preventivas, o algo ha fallado en nuestra implacable misión, debemos ponernos manos a la obra con el tratamiento contra los piojos. Aunque se piensa que los niños suelen ser quienes tienen una mayor tendencia a tener piojos, lo cierto es que los adultos no se libran de estas visitas desagradables.​

Si te estás planteando cómo combatir piojos y liendres en niños, te contamos algunas cosas que pueden ayudarte:​

• Los remedios caseros para los piojos no tienen una eficacia demostrada. En el caso concreto del vinagre, por ejemplo, aunque es cierto que puede ayudar a lograr que las liendres se desprendan del cabello, no acaba con el problema ya que no mata a los piojos.
• En el caso de un episodio de pediculosis se deben utilizar los productos adecuados, con eficacia científicamente probada. Deben utilizarse bien, eso sí. Para ello, debemos leer las instrucciones y seguirlas al detalle.
• Los pediculicidas con compuestos como permetrina y siliconas sólo deben utilizarse cuando encontramos piojos vivos, y sólo en mayores de dos años. Por debajo de esta edad, sólo debe utilizarse lendrera o, entre uno y dos años, el alcohol bencílico.​

El farmacéutico puede ayudarnos a elegir el mejor tratamiento para nuestro caso, aunque ciertos medicamentos deberán ir bajo prescripción médica.​

En las farmacias podemos encontrar packs anti piojos compuestos por loción y champú como el de Farline, que no daña o engrasa el cabello e incluye lendrera metálica para favorecer la desaparición de los piojos.